El mejor ranking de su carrera (13º) es sólo uno de los logros de Lucas en esta temporada.
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| Lucas Pouille festejando en París (Foto: @canal_tenis). |
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| Campeón de Metz 2016. |
El año 2016 había sido el año de despegue para
el francés, quien accedió a dos cuartos de final de Grand Slam consecutivos
(Wimbledon y US Open), además de conseguir su primer título ATP, derrotando en la final
de Metz a Dominic Thiem. Se preparó para no quedarse atrás en 2017, y cumplió.
Si bien no llegó a cuartos de final de un GS,
sí accedió a octavos de final en Flushing Meadows y a tercera ronda en Roland
Garros. Como si fuera poco sumó otros tres trofeos (con el ATP 500 de Viena
como destacado) de campeón a su cuenta, y en tres superficies distintas, siendo
el único tenista que consumó esto en el presente año (Viena en indoor; Stuttgart en césped; y Budapest en arcilla).
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| Lucas se coronó en el ATP 500 de Viena. |
En el ámbito Masters 1000, accedió a las
semifinales de Montecarlo y a la semana siguiente ganó el título en Budapest,
Hungría, arribando de esta manera a su ránking más alto hasta el momento, 13º.
En el ATP 500 de Beijing estuvo a un punto de
derrotar al número 1 del mundo, Rafael Nadal, en primera ronda, pero el español
pudo dar vuelta ese partido y terminó coronándose como vencedor del certamen.
Con un gran cierre de año, Pouille apunta alto en el 2018, ya se instaló cómo una amenaza seria en el circuito y perdió el respeto contra los mejores jugadores. Es cuestión de esperar.
Autor: Darío Federico Maiolo Contento
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