sábado, 27 de enero de 2018

Sebastian Korda: el tenis como herencia familiar

El menor del clan Korda se proclamó campeón del Australian Open Junior 2018, veinte años después del título de su padre en mayores.


Sebastian arrancó su andadura.

El tiempo pasa pero las emociones quedan. Sebastian Korda, estadounidense de 17 años, se consagró en el Rod Laver Arena, mismo estadio en que su padre festejó su mayor hazaña deportiva hace veinte años.

Petr Korda levantó el trofeo en suelo australiano en 1998 al derrotar a Marcelo Chino Ríos en la final. Lo que parecía ser un segundo aire en la carrera del checo -subcampeón en Roland Garros 1992-, se convirtió en un manto de dudas. Dio doping positivo y toda su trayectoria se vino abajo, al punto de retirarse diecinueve meses después de conseguir su mayor éxito. Dos décadas más tarde emerge el hijo pródigo. 
Sebastian respiró deporte desde su nacimiento. Su madre, Regina Rajchrtova, llegó al 26° en el ranking WTA y sus dos hermanas mayores, Jessica (24) y Nelly (19), son golfistas profesionales -Jessica fue campeona del Abierto Australiano de golf en 2012-. Era cuestión de tiempo para que se decidiera por una disciplina, de hecho, su destino se encaminaba al hockey sobre hielo. Sin embargo, presenciar un partido de Radek Stepanek en US Open 2009, lo hizo rever su decisión. No se equivocó.

El antes y el después.
El joven norteamericano que mide 1,93 metros, se proclamó en Australia después de vencer 7-6 (6) y 6-4 a Chun Hsin Tseng. El actual 842° del mundo y 7° en ITF, se cargó a varias potencias del juniors para conquistar el título, como a Marko Miladinovic, según los especialistas una de las máximas promesas del tenis mundial.

El futuro parece sonreír para el menor de los Korda. Talento y genética hay de sobra, es cuestión de pulirla. ¿Igualará a su padre?

Imagen: Australian Open.

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